Se pide un Plan Marshall para África, repetición de aquel esfuerzo estadounidense que resucitó Europa tras la II Guerra Mundial; pero ese continente poco tiene que ver con el Viejo de hace medio siglo.
Sesenta veces la superficie de España, 720 millones de habitantes, casi todos pobres. Muchas áreas con un tercio de sus habitantes enfermos de SIDA.
La malaria extermina decenas de millares de niños anualmente. Con ecologistas impidiendo el uso del DDT que erradicó la enfermedad de entre nosotros: un plan Marshall sería usar el insecticida para multiplicar las cosechas y matar los mosquitos transmisores. El DDT le quitó hambre y enfermedades a los españoles. ¿Por qué quiere olvidarse que hace medio siglo España era casi como África, incluyendo que había zonas que padecían sus enfermedades endémicas?.
África negra: los árabes todavía atraviesan el Sahara para apoderarse de tierras y cazar esclavos. Nuestros queridos saharauis nos esconden, cuando los visitamos, a sus esclavos negros.
¡Qué terrible es ser negro!. Durante siglos tratado como un animal irracional. Hasta hace doscientos años estaba aún en la Edad de Piedra: antropofagia ritual, guerras tribales, venta de los vencidos a los esclavistas árabes y europeos.
Colonialismo: dos siglos de vasallaje y esclavitud sexual, sin formar élites o clases medias. Y los que podrían contribuir a construir sus pueblos crecientemente destruidos, huyen ahora hacia la cerrada Europa, aunque nunca hacia tierras islámicas, más racistas aún.
A mediados del siglo XX se descolonizaron países con falsas fronteras, dándole el poder a políticos fantoches e infectos. Volvieron las luchas tribales: les llevamos el brutal socialismo sovietizante y el genocida capitalismo de belgas y holandeses.
La ONU traicionando a los pueblos masacrados. Sudán. Genocidios patrocinados por Francia, como el de Ruanda. Antes, el corrupto redactor de la Constitución europea, Valery Giscard D’Estaign, cuando era presidente de su país, se dejaba comprar con diamantes del antropófago Bokasa.
España fue, posiblemente, la menos inhumana de las naciones coloniales. Claro que su territorio, Guinea Ecuatorial, tiene la superficie de Galicia y medio millón de habitantes.
África, África, donde la gente estaba hermanada, como en Ruanda, los colonialistas belgas inventaron tribus inexistentes: tutsies eran los guapos, claros y altos, hutus los más feos y oscuros. Así se vigilaban unos a los otros, así se les dominaba mejor. Los que se sentían inferiores masacraron a los que se creían superiores. Continente aún infantil, ¡África, África!.
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