La carta- homenaje del presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial al fallecido juez de instrucción del juzgado nº 13 de Barcelona, Juan Antonio Ramírez Sunyer, que investigó los presuntos delitos que prepararon el falso referéndum de la Generalidad del 1 de octubre de 2017, ha irritado profundamente a los separatistas y a sus aliados, incluidos los más cercanos al gobierno Sánchez.
Carlos Lesmes recordó que al iniciar esa instrucción Ramírez Sunyer cambió la historia de España, lo que según sus críticos manifiesta una concepción de la labor jurisdiccional que no tiene cabida en la Constitución.
Por escribir que “cambiaste la historia de España” los separatistas, Podemos y otros antisistema piden la dimisión o la destitución de Lesmes, que además resaltaba la vida de Ramírez Sunyer.
Natural de Barcelona, ingeniero en ejercicio y amante de la justicia, preparó las oposiciones a la judicatura y a los 44 años de edad obtuvo plaza de juez; como tal trabajó siempre en Cataluña.
Debe recordarse que para acceder a esa carrera hay que saber más Derecho que cualquier licenciado, pues para ganar la oposición deben estudiarse en exclusiva las leyes por lo general de tres a diez años.
Ramírez Sunyer fue un juez meticuloso y firme hasta su muerte el pasado domingo, incluso en los últimos meses de sus 71 años soportando una larga y dura enfermedad.
Y claro que cambió la historia de España: si no hubiera iniciado las investigaciones para descubrir cómo se robaban y falsificaban documentos y se emprendían gastos ilegales dedicados a la independencia, se habría llegado el 1 de octubre de 2017 a un punto sin vuelta atrás, porque no habría pruebas de golpe independentista.
Su primer paso inició el fracaso del golpe y abrió el camino de la Audiencia Nacional y del Tribunal Supremo para castigarlo.
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¿Que cambió la Historia? Lo tienes claro, Manolo.
Hay ahora más independentistas que nunca, y más decididos que nunca a conseguir la secesión. No ha cambiado la Historia, ha reforzado sus tendencias. También ha corroborado la línea más clara a nivel mundial de la Historia de España como país autoritario e irrespetuoso de los deseos de las mayorías; el único de Europa occidental que sigue prohibiendo y reprimiendo referéndums porque los teme.
Así que el juez Lesmes, en vez de escribir cartitas a uertos, debería escribir a los vivos que están pagando hipotecas, explicando con todo lujo de detalles los vaivenes del Supremo sobre sus propios asuntos. La credibilidad del sistema judicial español, por las alcantarillas o cloacas.
Publicado por: Signapoore | miércoles, 07 noviembre 2018 en 23:58