Como tantos movimientos laborales de la era industrial el Día de la Mujer nació en Nueva York en 1909 en conmemoración de una huelga de trabajadoras industriales que habían salido de sus fábricas a protestar por las calles un 8 de marzo.
El entonces poderoso Partido Socialista estadounidense, y con la naciente Segunda Internacional Socialista, impulsó la conferencia creadora del “Día Internacional de la Mujer”.
La conmemoración se asentó más aún en EE.UU. tras el incendio en 2011 en los pisos altos de una fábrica textil de diez plantas, también en Nueva York, en el que murieron 123 mujeres y 23 hombres porque las puertas estaban bloqueadas para impedir hurtos de trabajadores al salir.
Desde 1975 la fecha está reconocida por la ONU, que desde entonces proclama un lema anual, siendo el de 2018 “El tiempo es ahora: activistas rurales y urbanos que transforman la vida de las mujeres”.
La convocatoria más divulgada en España tiene un lema diferente: “Juntas somos más”. Hábilmente ha sido controlada por feministas de extrema izquierda, de gregario chavismo que, en ausencia de feministas más moderadas –el PSOE de la Segunda Internacional actúa de comparsa--, son las protagonistas.
Tienen fijación con imponer la doctrina de género neocomunista: repiten que “nos sabemos lesbianas, trans, bisexuales, inter, queer, hetero”, con el hetero al final porque los cerebros dirigentes son mayoritariamente de lesbianas y propugnan la lucha contra la supuesta “alianza entre el patriarcado y el capitalismo”.
Patriarcado de todo hombre, que es el enemigo por ser el rival para el acto sexual, y capitalismo pese a darles de comer: ideas-fuente de las que colgar toda maldad.
Gran parte de las mujeres y las feministas moderadas no se adherirán a esta huelga de 24 horas que les exige que no usen tampones, sino copas menstruales, tampoco artículos de higiene femenina, rechazar a los hijos y a la pareja masculina, que no cooperen con sus allegados y que “paralicen así el Estado”:
Como juntas así serán menos, las que no obedezcan entusiásticamente serán tachadas de fachas, franquistas, reaccionarias, nacionalistas españolas y, obviamente, unas P…. Perras.
Por miedo a aparecer así, muchas caerán en la trampa y se unirán a la algarada aunque con pocas ganas.
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MAÑANA, TABARNIA
Persevero en mi convicción de que las feministas de manual, las neo-feministas o femi-progres, las "igualitarias de género" y sus complejos nos hacen flaco favor a las mujeres.
Nos revienta que exista un "Dia de la Mujer", y no un "Dia del Hombre", como si hubiera que rescatarnos de la marginalidad. Nos repatean sus "Cuotas" de poder para chicas, para ir colocando a quienes jamás llegarían a parte alguna por sus propios méritos. Nos exasperan sus jeremiadas victimistas, sus trucos semánticos, sus manipulaciones en los tribunales, sus mantras cansinos y su odio mal contenido contra el varón, como si la violencia doméstica no alcanzara también a abuelos, niños y padres. Y sobre todo a los cachorros no-natos, cuya eliminación via trituradora + desagüe promueven estas mozas de forma entusiástica, a razón de 125.000 al año, solo en España. Con la iniciativa de las miembras zapateras y el beneplácito de las peperas.
Desde la gratitud hacia las sufragistas que en su dia lucharon para sacar a la mujer de la discriminación que aun padecen las musulmanas (grandes olvidadas de las femi-progres), reitero mi público rechazo a las acomplejadas e histéricas feministas de manual que, de verdad, lo juro por Arturo (Perez Reverte, of course), nos desacreditan y desmerecen porque son muy borricas y cerradas.
La ingeniería social de la izquierdona rancia hoy podemita, es un proceso cancerígeno que cuesta erradicar. Victimizar a las mujeres nos convierte en un grupo inferior a proteger. Y el encasillamiento provoca soledades afectivas, fracturas familiares, desconfianza hacia el otro sexo, contactos esporádicos con temor al compromiso, separaciones masivas y demás
Con las aulas, despachos y laboratorios llenos de mujeres, a menudo mejores que sus colegas varones, es imposible creer que los chicos perseveren en el estereotipo machista o que las chicas no tengan la autoestima en su sitio. Independientemente de que luego haya tarados, violentos, alcohólicos, dispuestos a matar. Caiga sobre ellos todo el peso de la Ley y no pidan -precisamente los progres por demagogos- que retiren la prisión permanente revisable. Que se pudran en la trena!
Dedíquense las familias y los educadores a FORMAR en el respeto mutuo y la igualdad temprana, dejen de banalizar la sexualidad y saquen sus manos espurias de la esfera privada , en su permanente intento de destruir la familia, modificar conductas y controlar al personal
Salvo en el acto de parir, hombres y mujeres compartimos vida laboral, social y doméstica COMO NUNCA ANTES SE HIZO (Hay que ver a los jóvenes padres ocuparse de la prole como auténticas madres, para asombro de las abuelas ). Lo único que se necesita es mucho sentido común, legisladores responsables y una Justicia eficaz.
Mientras Cifuentes y Carmena compiten para ver quien es más progre, quien tiene mejor "perspectiva de género" y paga mejor las perogrulladas de su gente, a una le entran vivos deseos de emigrar...
Publicado por: MIRANDA | sábado, 03 marzo 2018 en 14:54