El escritor y titular de la letra R en la Real Academia Javier Marías escribió hace una semana que no suscribía que Gloria Fuertes “fuese una grandísima poeta”, y mesnadas de feministas se han lanzado contra él llamándole machista, fascista, y pidiendo que se rechacen sus novelas y artículos.
Con motivo del centenario de su nacimiento el próximo 28 de julio en una humildísima familia madrileña, el feminismo reivindica su figura como poeta excepcional, primer paso para hacerla icono infantil; aunque además hay otro motivo, como se verá más abajo.
Tras sufrir los terrores y las hambres de la guerra civil, a los 14 años, en 1941, publicó su primer poema; luego se hizo secretaria y colaboradora con poemas dulces e ingenuos en medios falangistas como Arriba y la revista infantil Flechas y Pelayos.
En los 1960 esas publicaciones dejaron de ser su principal fuente de ingresos, aunque mantuvo con ellas una leve relación, gracias al éxito de sus libros de poemas infantiles, siempre positivos, con pequeñas fábulas que eran lecciones de humanidad. Falleció en 1998.
Dice Marías que “sufrimos una campaña orquestada según la cual Gloria Fuertes era una grandísima poeta a la que debemos tomar muy en serio”.
Esta opinión, acertada o no, es solo parte del por qué odian al académico las feministas que quieren crear o desenterrar nuevos Cervantes con nombre de mujer.
Hay un segundo motivo más importante al que él no alude, y que quizás desconoce: Gloria era lesbiana, condición que llevaba discretamente fuera de su círculo íntimo de amigos, entre ellos este cronista, cuando no estaba en el extranjero.
Para ella era fundamental que los niños no conocieran su condición sexual. Siendo una mujer desinhibida entre amigos era muy pudorosa y tímida fuera, donde quería que sus seguidores sólo apreciaran sus mensajes sobre paz y bondad.
Sépanlo: el feminismo dominado por lesbianas quiere aprovechar su centenario para presentarla como icono gay con el que hacer proselitismo entre las niñas. De estar viva se hubiera indignado.
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No se puede lanzar una afirmación de este calibre sin pruebas y sin precisión. ¿Quién, qué grupos, qué colectivo, qué institución desea presentar a Gloria fuertes como "icono gay" y además "para hacer proselitismo"? No sólo atribuye usted un hecho, sino incluso su intencionalidad: hacer proselitismo. ¿Lee usted las intenciones? ¿Calla usted el nombre del colectivo por temor a ser denunciado por calumnias por dicho colectivo?
Al final, incurre usted en lo mismo que incurría Javier Marías en su artículo: indefinición. Gloria Fuertes, para Marías, no es o no puede ser una gran poeta, y dedica una página a remacharlo. Pero NO DA UNA SOLA RAZÓN LITERARIA, de por qué no es una gran poeta.
Usted lo mismo, ni una sola mención del grupo que quiere hacerla un icono infantil. Muchos menos explica de dónde saca las "intenciones" de dicho grupo.
¿Dice usted que fue amigo de Gloria Fuertes? Oiga, pues entonces, ¿qué le hacían sus enemigos?
Publicado por: leigh fermor | martes, 27 junio 2017 en 16:57