El descarrilamiento del tren Alvia el día de Santiago a tres kilómetros de esa ciudad el 25 de julio de hace tres años, ha congregado nuevamente en el lugar del accidente a centenares de familiares, allegados y vecinos de las 79 personas fallecidas, que han exigido “la verdad” sobre el accidente.
Reclamaban también el pago de buena parte de las indemnizaciones debidas, cuya entrega se alarga, crispando a sus beneficiarios.
Además, recordaban un reciente informe de la Agencia Ferroviaria Europea crítico con la investigación española, centrada en el “error humano” del maquinista, sin profundizar en las “causas subyacentes” alegadas por las víctimas.
La justicia española había sentenciado la culpabilidad del maquinista, Francisco José Garzón, que admitió que circulaba a 190 kilómetros por hora y no a la señalada de 80 en la peligrosa curva de Angrois, donde ocurrió el accidente
No haber forzado la entrega de las indemnizaciones lo paga ahora la nueva presidenta del Parlamento, Ana Pastor, que cuando... PULSE EL ENLACE DE ABAJO PARA SEGUIR LEYENDO Y VER A SALAS...
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