Con su crecientes fracasos, los últimos en Galicia y el País Vasco, el PSOE está pagando sus ocho años de diversión, de borracheras del nuevo rico en las que cantaba: “¡Estamos por encima de Italia, muy pronto de Francia y vamos a sobrepasar a Alemania!”.
Al llegar al poder, en la primavera de 2004, José Luis Rodríguez Zapatero encontró la caja llena y dijo una frase histórica para justificar la locura dilapidadora que lo marcó: “Si se nos sale el dinero hasta por las ventanas”.
El optimista patológico, no antropológico, tras agotar el capital del país, siguió tirando el que le prestaban los mercados internacionales, dedicándolo a unas buenas obras progresistas imposibles de mantener por una España mucho menos rica que lo que decía.
La resaca de ahora no es solo del PSOE, es de todos los españoles que cayeron bajo el embrujo de quien los arruinó.
El desenfreno del exprimer ministro, que es ahora consejero del Estado, ¿qué ocurrencias propondrá?, estuvo ya a punto de hundir la economía occidental.
Es tan cierto que, igual que hicieron Merkel, Sarkozy y los británicos Brown y su relevo Cameron, Barack Obama tuvo que llamarle el 10 de mayo de 2010 alucinado por la orgía en la que España había metido al mundo.
Por indicación de su idolatrado Obama redujo numerosos derechos sociales de todos, dañó a los funcionarios públicos y ni aun así frenó la hemorragia económica que convirtió el país en un cesto con agua.
Ahora acusamos a Rajoy de incapacidad para cortar la sangría.
Aunque, aparte del PSOE, los españoles son también culpables: eligieron y religieron a este dipsómano monetario para que los emborrachara.
España tiene resaca, y la del PSOE parece, además de incurable, que está matándolo.
--------
Supongo que ya no está a tiempo de cambiar de escuela periodística, pero esa manía de pluralizar en primera persona resta todo viso de ecuanimidad y objetividad a cualquier asunto, cuando no insulta y ofende a los lectores.
Pero, bueno, de todos modos creo que ya va siendo hora de darse por enterado de que hasta el más tonto de España sabe que el plan de Rajoy es succionar la sangre a los españoles para mantener su carísimo y corrupto sistema político.
¿Qué clase de periodismo es ése emperrado en negar o darse por no enterado de lo que piensan, sienten y saben todos los españoles? ¿Es periodismo?
Publicado por: noespaisparadecentes | miércoles, 24 octubre 2012 en 16:18