Muchos catalanes que se declaran también españoles desearían asistir a la manifestación convocada en Barcelona el día de la Fiesta Nacional del 12 de octubre para rivalizar en número con la de la Diada, convertida en independentista.
Pero sería un milagro que aparecieran a las 12 de la mañana en la Plaza de Cataluña tantos constitucionalistas como hubo catalanistas que recordaban doloridos el 11-S que Carlos III de Austria perdiera en 1714 la guerra de Sucesión por el Reino en España frente a su primo Felipe V de Borbón.
Las manifestaciones siempre tendrán muchos más catalanistas, ahora independentistas, a pesar de que la fecha recuerda a Rafael Casanova, que había iniciado la guerra civil al grito de ¡Viva España!
Derrotado por el Borbón, recobró todos sus derechos y títulos Porque los manifestantes del 11-S, entre 300.000 y los 1,6 millones, olvidan esta historia y carecen del pudor democrático que paraliza a los defensores de la Constitución.
El 11-S de 2012 unió una derecha nacionalista que expurgaba su corrupción envuelta en la senyera con las izquierdas y ultraizquierdas marxistas-leninistas y anarquistas, y su senyera estelada.
De alcanzar la independencia --y los burgueses de la senyera solo presionaban con su número a Rajoy para sacarle bonificaciones--, terminarían matándose como antes y durante la guerra civil: por eso la burguesía catalanista recibió a Franco como su héroe.
La parte constitucionalista teme especialmente la aparición en sus actos de agitadores franquistas que siempre desacreditan sus concentraciones.
Si entre miles de banderas constitucionales aparece una con el águila y la leyenda “Una, Grande, Libre” los periódicos y televisiones reproducirán sólo esa y dictaminarán: “Fascistas españoles contra el nacionalismo democrático”.
Esa es una razón fundamental para que muchos constitucionalistas anuncien ya que no acudirán el día 12 a mostrar su vinculación al resto de España.
-----
No entiendo qué es eso de los catalanes de lo que tanto se habla sólo en los medios. Enchufas la TV o la radio a horas de tertulias y telediarios y hay un montón de gente hablando y montando follón sobre el tema en multitud de cadenas. ¿Es un virus o es que existe un pacto secreto de una legión personajes virtuales para hablar de lo mismo? ¿Es una conspiración para acabar con el invento de la TV o sólo es una cortina de humo para ocultar algo de verdad serio e importante? ¿Alguien sabe algo?
Publicado por: noespaisparadecentes | jueves, 11 octubre 2012 en 15:31