Hay pequeños gestos que muestran el compromiso y la responsabilidad de los políticos con su trabajo, y su respeto a las formas correctas.
Pues debe saber usted que numerosos comunicados gubernamentales enviados a los periodistas comienzan con el sindicalista “Compañeros y compañeras”.
Pues debe saber usted que numerosos comunicados gubernamentales enviados a los periodistas comienzan con el sindicalista “Compañeros y compañeras”.
Una presentación para cofrades e intercambio de favores, y un protocolo con tal falta de compostura que demuestra la ausencia de seriedad política de este Gobierno.
Se empieza así y lo siguiente es que no se necesita obedecer la Constitución cuando sus costuras oprimen a coleguillas, como los nacionalistas y socialnacionalistas autonómicos.
Pasa sin transición de prometer pleno empleo, grandes pensiones, dinero sólo por existir, al paro multimillonario, a reducir salarios, subir los impuestos, a congelar las pensiones y a desmantelar viejísimos avances sociales.
Como el espíritu dominante es la frívolidad, el vamos a tratar de compadres a todos, especialmente a los coleguillas, y si el Tribunal Constitucional arruina la idea de Nación que querían los políticos catalanes, aquí estoy yo, compañeras y compañeros, para cometer desacato y aconsejarles que desacaten al Tribunal.
Porque, en el fondo, ¿qué mas da? Nación: si todo está en los sentimientos, y si dicen tener sentimientos de Nación y me entregan sus votos, ¿por qué voy a respetar al Constitucional, que utiliza argumentos racionales, no emocionales?
El Tribunal le ha negado a la Generalidad una Hacienda, una Justicia propias y todo lo que le permitiría ser casi un Estado independiente. Pero, ¿quién es la Constitución para imponer su voluntad?
Sobre la Constitución he decidido parafrasear a Marx “Estos son mis principios, pero si no le gustan, tengo otros”.
Compañeras y compañeros: aceptemos que la Generalitat catalana tiene derecho a seguir mi ejemplo y a practicar la inconstitucionalidad, y yo a seguir a mi admirado Groucho.
La Constitución es la que es. A esa constitución y al tribunal que la defiende acudió el PP. Le dieron la razón en parte. Ese mismo partido político ha dicho que la policía falsifica pruebas. La policía que debe velar por la constitución. El PP, Rajoy, ha dicho que Camps será candidato sí o sí. Como se ve: todo un ejemplo de coherencia constitucional.
Publicado por: Ahorasi | domingo, 18 julio 2010 en 14:12