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miércoles, 02 diciembre 2009

Comentarios

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¡Ojiplático me he quedado! ¡Qué valor tiene! Puede que uno sea más inocente de lo que se cree.

Nunca me había planteado que ciertos señores estuvieran comprometidos con una determinada causa por haber sucumbido a placeres prohibidos, aquende en el primer mundo.

Un saludo

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