La aplicación de las leyes españolas en la misma España podría costarle la vida a los españoles residentes en Mauritania, país cuyos inmigrantes exigen que se acepten aquí sus costumbres y la sharía, legislación islámica, aunque violen los Derechos Humanos más elementales.
Debe recordarse el reciente caso de la niña nacida en Cádiz, por tanto española, de padres inmigrantes que la llevaron a Mauritania a los 12 años para casarla con un primo de 39.
Cuando la niña volvió denunció que había sido violada, por lo que la justicia española condenó al marido a 13 años y 6 meses de prisión por agresión sexual; a la madre, a 17 años como coautora de la agresión; y al padre, a un año y seis meses por amenazas y coacciones.
Enseguida, numerosos inmigrantes mauritanos se manifestaban en Cádiz contra estas sentencias exigiendo respeto para su cultura y religión.
Pero este último fin de semana la protesta se extendió a Mauritania: "Si no se acaba con la injusticia cometida contra nuestros parientes en España, no podremos impedir que los mauritanos descontentos reaccionen con violencia contra la comunidad española en Nuakchot", advirtió Sidi Brahim Sidat, abogado y antiguo diplomático mauritano, en una manifestación de centenares de habitantes de la capital del país irritados con la justicia española aplicada en España a mauritanos.
Peor aún, un jeque, Mohamed El Hacen Uld Dedú, emitió una fatua o decreto islámico en el que llamó a la comunidad de los creyentes, la Umma, a apoyar y a defender a los encarcelados, rechazando las leyes españolas.
Como estas amenazas crecerán conforme aumente la población islámica, incluso planteando problemas de derechos humanos más escalofriantes, ¿nos someteremos a la sharía en nombre de la Alianza de Civilizaciones para convertirnos en Eurabia?
Si tiene que aplicarse la Sharía en España, tanto yo como el resto de mujeres del país estamos listas.
Es una vergüenza, si vas a su país debes respetar sus costumbres y pobre de ti que no lo hagas. En cambio, ¿vienen ellos aquí y pretenden imponerlas con amenazas?, creo que necesitamos unas leyes más estrictas en ese sentido, una cosa es tolerancia y otra dejarse pisar.
Aunque una cosa he de decir, al paso al que vamos en España, con el hembrismo enmascarado de nuestro Gobierno actual, por desgracia hay más posibilidades de lo contrario.
Publicado por: Minerva | miércoles, 24 junio 2009 en 20:34