Si establecemos la clasificación de la calidad de los muertos según el impacto informativo internacional que obtienen al fallecer, afirmaremos que Michael Jackson es un muerto de primera.
El final del eximio artista y extravagante ciudadano abrió los medios informativos del mundo con espacios comparables solamente a los que logró Lady Di cuando falleció, en París, en el verano de 1997: es que muy pocas personas son capaces de ser convertidas masiva y simultáneamente en fenómenos globales.
Fuera de Paul Mccartney pocos europeos obtendrán esta categoría, ninguno español. De su idioma sólo hay un candidato, Fidel Castro, por el interés que genera un dictador, medio siglo hostilizado por EE.UU., que deja en la miseria moral y económica a su país.
Muertos de primera en el pasado fueron, buenos y malos, Kennedy, Elvis Presley, Juan XXIII, Sinatra, John Lennon, Mussolini, Hitler o Stalin, el Ché o Franco.
La reina Isabel de Inglaterra será muerta de primera, pero tanto su heredero, Carlos, como los miembros de las demás monarquías, incluyendo la Casa Imperial japonesa, serán de segunda.
Mao Zedong fue muerto de primera, pero de segunda el hombre que realmente cambió China tras él, Deng Xiaoping.
Así son las cosas: Raúl Castro, desaparecido Fidel, será muerto de tercera, como Perón o Pinochet.
En este momento EE.UU. es el único país que tiene un decena de previsibles muertos de primera, como Jackson, provenientes de todas las actividades humanas, científicas y tecnológicas, humanísticas y artísticas.
Rodríguez Z. ascenderá a la quinta división, aunque en España tenemos un consuelo: a falta de muertos de primera podemos organizarle grandiosos entierros de primera a nuestros líderes políticos.
Si son creyentes, tendrán entierros de primera llevando decenas de curas y hasta cardenales, y si son descreídos, poniéndoles muchos alabarderos, diputados y carros de caballos, como cuando procesionaron a Tierno Galván.
me han surgido varias dudas: fragagá y carrillo, por ejemplo
Tierno galván, ese sí era el político típico. Hecho a sí mismo y también hecha por él mismo su biografía. Es lo que tiene la universidad... todo lo hace grande
Publicado por: Nemigo | domingo, 28 junio 2009 en 18:30