España no se rompe y desde un punto de vista físico la Hispania romana nunca desaparecerá porque es una península que incluye a Portugal y ni siquiera ese país se ha apartado para formar la balsa de piedra imaginada por Saramago o una isla volante como el Castroforte de Baralla de Torrente Ballester.
Lo que se rompen son vínculos afectivos y culturales entre los habitantes de España, nombre del país vedado en el lenguaje políticamente correcto.
En neolengua debe decirse Estado español. Como Franco, que se intitulaba Jefe del Estado, expresión más rotunda y eufónica que Jefe de España. Realmente, quienes se niegan a decir España añoran instintivamente al Caudillo.
Demostrada la invulnerabilidad física del territorio, es ley que Barcelona estará siempre a unos 969 kilómetros por carretera de Mérida, capital de Extremadura. Y lo que está rompiéndose es la hermandad de los españoles de ambos lugares, y de muchos otros.
Seguimos el ejemplo de Bélgica, donde unos gobiernos bienpensantes y débiles con los nacionalismos apoyaron hace tres décadas una federación separadora de flamencos y valones, que enseguida fue ruptura cultural y personal.
Ese país existe aún como Estado, pero los belgas están disolviéndose, odiándose mutuamente.
Porque los ciudadanos de un país con diferencias económicas en sus distintos territorios, cuando explotan cualquier característica que pude diferenciarlos, lengua, religión, etnia, tienden a despedazar afinidades, incluso llegarán a odiarse.
Y los gobiernos que en lugar de atenuarlas azuzan las diferencias no sólo culturales, sino de trato y económicas, como hacen los de Rodríguez Z, son culpables de la creciente separación, desprecio y odio entre algunas poblaciones.
Eso es lo que está dejando Z para la Historia, que todavía está empezando, al enfrentar con sus estatutos diferenciadores, como si ocuparan posiciones antípodas, Barcelona y Mérida, norte y sur, este y oeste.
-------------
NOTA IMPORTANTE
Algunos lectores me han escrito recordándome que las islas Baleares y Canarias también son España y que la redacción de esta crónica se olvida de su existencia. Tienen razón. Y más aún cuando ambos archipiélados --y otras partes de la España no continental o europea-- son lugares que visito frecuentemente. Presento mis disculpas por este error en un escrito que se refiere a toda España y a sus diferentes regiones y que, incluyendo los terrotorios españoles olvidados por mí, sigue teniendo igual valor e intención. Sin que sirva de justificación, recuerdo que "Errare humanum est", como decían los clásicos, y Séneca certificó.
el famoso café para todos!
Para qué necesita madrid tener comunidad?
De qué sirve que ceuta y melilla sean: ciudades autónomas?
La comunidad de castilla y león! Menos en león que se dice: comunidad de león y castilla!
La comunidad de navarra que pretendían formase parte de euskadi
O el principado de asturias (que no existe en la constitución)
Publicado por: Nemigo | domingo, 10 agosto 2008 en 00:55