Imaginemos que tras pasar medio milenio en su tumba el terrible Inquisidor General Tomás de Torquemada resucita y convoca en Madrid una “Conferencia Mundial para el Diálogo” entre religiones.
Presurosas, las autoridades españolas y mundiales, laicas, católicas, protestantes, judías, budistas o taoístas, acuden a cumplimentar a quien en su territorio persigue, encarcela y mata a esas mismas personas si proclaman sus creencias.
Está ocurriendo realmente en Madrid entre los días 16 y 18 de julio, donde el Rey de Arabia Saudita, Abdullah Ibn Abdelaziz, paga con sus petrodólares una conferencia a la que asisten unas 300 personalidades mundiales de distintas religiones y gobiernos, desde China hasta EE.UU. o Suráfrica.
Por parte española, el Rey Juan Carlos presidió la apertura a la que estaban invitados el cardenal Rouco Varela, representantes protestantes y un José Luís Rodríguez Z desconcertado porque esta conferencia suplanta a su cadavérica Alianza de Civilizaciones.
Quizás sepa ya que la ONU había declarado 2001 Año del Diálogo de las Civilizaciones, y que la Asamblea General publicó después su “Declaración Internacional del Diálogo de las Civilizaciones”: su idea había nacido rancia.
Lo inquietante de la presencia de quien rige un país donde las mujeres son bultos negros sin individualidad, que ejecuta homosexuales o a ateos, o a los árabes que se hagan cristianos, es que los petrodólares venden a este Torquemada como amante de la buena relación entre todas las creencias.
Y, aún más inquietante, quizás otras religiones se unan a él en lo que el documento oficial de la Conferencia dicta como objetivo: “Consolidar los valores morales y las nobles prácticas sociales contra el libertinaje, decadencia moral y la disolución de la familia”.
Asombra que haya occidentales que escuchen, y que incluso apoyen, en el siglo XXI a estos clérigos peores queTorquemada. Como si echaran de menos a esas inquisitoriales mentes medievales del wahabismo saudí, base del fascismo islamista.
Salgo de la cueva para comentar este post del Sr. molares que me parece IMPORTANTÍSIMO. Sobbre todo porque hoy en día, salgo de casa cuando quiero y como quiero, y trabajo en lo que quiero. ¡Y SI ESTO SIGUE ASÍ ME VEO CON BURKA Y REDUCIDA A LA COCINA!
Seguiré aprovechando lo que duren estos años de libertad, QUE PUEDEN SER CONTADOS, mientras no se comprenda, como esta "conferencia mundial" indica, que el islamismo actual es como el catolicismo de hace 500 años. Es el horror Iglesia-Estado, que hay que combatir a toda costa. Es la represión de la libertad y de la modernización de la sociedad, que deja a cualquier Iglesia inevitablemente sin negocio económico. Debe comprenderse que la religión es un fenómeno privado, una experiencia propia y espiritual, y otro concepto es un atraso. Debe entenderse que Benedicto y Rouco están donde están (con un poder muy relativo), porque hubo gente con valor que tuvo lo que había que tener para poner a la Iglesia en su sitio hace muchos años. Pero que si se les deja, Rouco y Benedicto, aliados con el islamismo, incluso con el ex-dictador-feudal Dalai Lama y con el ultra-religioso Bush, harán entre todos lo posible para que la religión vuelva a tener el poder que tenía, manejando nuestras almas, nuestra culpabilidad, nuestro dinero, nuestra libertad y nuestra sociedad.
El interés de todos ellos es el mismo, el del Dalai Lama, Rouco y Benedicto, recuperar el poder perdido. El de Bush, dominar su sociedad mediante la religión, el miedo y la incultura. El del Islam, conseguir el control mundial (ay mi Al-Andalus) y dominar a todos los anteriores "líderes". Amistades peligrosas que nos llevarán socialmente a Atapuerca. Se acerca una peligrosa marea de atrasos. Y en medio de la marea, Zapatero sin timón, con sus felices ideas y sus tibiezas, ayudando al mal que se disfraza de bien.
Cuanto daño hace la tolerancia mal entendida. Desde ETA hasta el Islam. ¿Cobardía, estupidez o intereses económicos?
El lema del líder saudí es el mismo que emite la derecha (queriendo o sin querer), Rouco y Benedicto. Es el mismo lema que criticó ZP, lo que le ayudó a ganar las elecciones: "evitar el libertinaje, la decadencia moral y la disolución de la familia". ¿Qué haces ahí Zapatero? ¿Rouco y Benedicto: vais a vendernos por 30 monedas de plata, como Judas?
Publicado por: queridanónima | viernes, 18 julio 2008 en 23:15