Constantemente se administran en España medicamentos paliativos del dolor para evitar terribles agonías, aunque anticipen la muerte del enfermo: lo aprueban la ley y la praxis médica.
La despenalización del aborto no sufre excesivas resistencias si se cumplen las previsiones legales, acordadas cuando derecha e izquierda dialogaban sobre ética y moral.
Ahora, José Luís Rodríguez Z anuncia una reforma liberalizadora de la eutanasia y el aborto.
Lo que genera cierta preocupación por los, según el INE, 1.980.995 españoles mayores de 80 años vivos a 1 de enero de 2008. Son 1.339.668 mujeres y 641.287 hombres.
Porque Z y los suyos se volcaron en la defensa de un médico izquierdista de Leganés, Madrid, jefe de anestesistas de un hospital denunciado por su alta proporción de ancianos muertos en comparación con otros centros.
Lanzó la alarma la Asociación Defensor del Paciente, respepetada hasta entonces como ideológicamente neutral. Fue avalada por la comisión Ética del Colegio de Médicos madrileño.
Las pruebas eran débiles, como en los casos en los que un miligramo mata o da vida: el médico fue absuelto por la Audiencia de Madrid.
Pero la sospecha continúa: hay familias que insisten en que los suyos ingresaron lejos de una situación terminal y que se los devolvieron cadáveres.
No es debate de derechas, izquierdas, creyentes o ateos: es sobre las sentencias de muerte que podrían dictar unos médicos ideologizados.
El caso del aborto es también grave: la Vicepresidenta ha atacado a los tribunales que investigan a clínicas abortistas que atraían clientas de toda Europa porque las libraban de embarazos de hasta ocho meses y medio y destruían los restos con picadoras de carne.
Quizás deban mejorarse ambas leyes, pero confiarle vidas o muertes quienes consideran progresistas a médicos y centros así es muy peligroso.
si se quiere abortar la mayoría de las mujeres acuden a clínicas privadas. Más que nada porque como ellas mismas dicen: no quieren esperar y mucho menos tener que dar explicaciones en ventanillas y rellenar impresos
En cuanto a la eutanasia (es eso no?) en países mucho más avanzados socialmente como holanda. Está permitido que médicos administren medicamentos a pacientes con el fin de terminar con su sufrimiento. Nadie se escandaliza. Hay documentales en tv al respecto donde ellos explican lo duro que es y que lo hacen porque creen en el bien del paciente y en que para nada sirve que sufra y tenga una agonía en la que deja de ser humano. Los jueces que son llamados tras esas inyecciones letales para certificar la muerte NO se rasgan las vestiduras ni nadie (hipócrita simplón) pretende que se imponga su visión mesiánica de la vida. Se acepta y se asume que la muerte forma parte de la vida. Es un fin y como tal no tiene porque ignorarse
No somos dioses. Somos humanos y debemos aceptar que cada uno decida sobre su vida. No eligió estar aquí, puede elegir cuando quiere dejarnos
Publicado por: Nemigo | miércoles, 09 julio 2008 en 23:51