El 23 de febrero de 1981, y mientras Tejero daba su golpe de estado, un capitán de Caballería de 39 años, José Mena Aguado, se mantenía firme en su acuartelamiento en Valladolid respetando la Constitución.
El 6 de enero de 2005 José Mena Aguado era Teniente General, Jefe de la Fuerza Terrestre española. Se celebraba la Pascua Militar y pronunció un discurso en Sevilla que le valió el arresto inmediato como si fuera un golpista: evocando el artículo 2 de la Constitución que consagra “la indisoluble unidad de la Nación española”, añadió que las Fuerzas Armadas no deben regionalizarse para someterse a normas lingüísticas o jurídicas de las regiones donde estén destinadas, sino a las estatales.
Y leyó el artículo 8 de la Constitución, por el que las Fuerzas Armadas, cuyo jefe supremo es el Rey, deben garantizar “la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional”.
Parecía pedirle al Monarca que frenara el Estatuto de Cataluña por sus numerosos puntos que invitan a una secesión, como está detectándose ya. Muchos militares, pero también civiles, incluso del verdadero PSOE y no del zapaterismo, pensaban como él.
Leer la Constitución no es anticonstitucional, pero hacerlo terminó su carrera: arresto y retiro forzoso.
Por aquellas fechas Rodríguez Z decía que el concepto de Nación española era “discutido y discutible”, pero defendía la aparición de la Nación catalana.
Y negociaba políticamente con ETA el futuro del País Vasco, aunque negándolo en el Parlamento. Luego, él mismo reconoció que mintió, aunque no lo contó todo: que por cada cesión de soberanía a ETA los terroristas exigían más, como absorber Navarra. Por eso se rompieron los acuerdos ya alcanzados que hacían de Euskadi un país casi independiente.
Tras dos años de silencio, Mena habla. En un libro: “Militares: los límites del silencio” (Edición Personal).
Votaría al PSOE si se librara de Z: cree que lleva España a la destrucción. Kosovo está aquí, al lado, y Mena era un demócrata ya en 1981. ¿Lo fue en 2005?
-------------------------
GOLPISMO, SEGÚN “EL PAÍS”
Está bien ser guardabarreras y guardaespaldas de Rodríguez Z, papel que tiene adoptado el que fue muchas veces respetable diario “El País”.
Pero es ir mucho más allá de la pasión partidista convertir lo blanco en negro, y viceversa, y especialmente en la información sobre el libro del general Mena.
Porque ese periódico ha ocultado conscientemente que el militar basa todo su discurso en las atribuciones del Rey según el articulo 8 de la Constitución, que dice textualmente, en su punto 1:
“Las Fuerzas Armadas, constituidas por el Ejército de Tierra, la Armada y el Ejército del Aire, tienen como misión garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional”.
La Ley Orgánica 5/2005 de 17 de noviembre de Defensa Nacional que desarrolla ese precepto constitucional, dice en su artículo 3 que: “Corresponden al Rey el mando supremo de las Fuerzas Armadas y las demás funciones que en materia de defensa le confiere la Constitución y el resto del ordenamiento jurídico”.
Como se ve, él último administrador de las garantías a las que se refiere el articulo 8 de la Constitución es el Rey.
Tenemos, por tanto, una Ley de Leyes que para el principal periódico del zapaterismo es golpista. E incluso un Rey que podría ser golpista si deseara apelar al artículo 8 de la Constitución, por muchas cautelas legales que se hayan puesto para evitar que adopte tal medida.
Porque en un caso extremo podría tomar el poder de las FF.AA. para “garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional”.
Y si esto es así y no quieren aceptarlo, que se reforme la Constitución. Porque si quien le pide al Rey que actúe según ese artículo 8 se convierte en golpista, en realidad la golpista es la propia Constitución.
Y Rodríguez Z y quienes lo apoyan deberían denunciarla como tal en esta campaña electoral: ¡La Constitución es golpista y por eso la sorteamos trampeando con el Estatuto de Cataluña y negociando políticamente con ETA el futuro del País Vasco!
Compruébese la manipulación de “El País” Descargar el_golpe_de_estado_segn_el_pas.doc
Querido Manolo (imagina mis manos subiendo y bajando enérgica y continuamente):
Desde mi puesto de Presidente del Gobierno de España, es mi deber interpretar la Constitución según le convenga a mi partido, que a toda costa tiene que mantenerse en el poder, ya que es lo mejor para los ciudadanos y ciudadanas, sean vascos o vascas, catalanes o catalanas, gallegos o gallegas, españoles y españolas (no me dejo ninguna nación más, ¿no? Ah, bueno, quizá el Cantón de Cartagena....). Incluyo, faltaría más, al general Mena; por eso lo mandé a su casa, porque era lo mejor para él.
Un afectuoso saludo.
Z.
Publicado por: Hiel | viernes, 22 febrero 2008 en 11:15