Hay un símbolo que, aparte del Corán o la sharía une a la Umma, la comunidad musulmana: la vista del minarete como expresión del poder religioso sobre el terrenal, como ocurría con las agujas de las catedrales medievales, símbolo del señorío divino sobre las demás obras humanas.
La altura de estas torres simboliza la lucha secular entre las iglesias y el pensamiento libre: con el paso de los siglos y el triunfo del racionalismo, en Europa fue reduciéndose la cota de los campanarios y elevándose la de otras torres públicas, como las sedes de los ayuntamientos.
Es una historia que estudian arquitectos y antropólogos. Y que se revive ahora con la exigencia de numerosos inmigrantes musulmanes en Europa de que se les permita erigir mezquitas con altísimos minaretes para mostrar el poder de su fe sobre todo lo existente.
La construcción de minaretes está produciendo un gran debate en Alemania y en la antes calvinista Suiza, donde sólo la derecha se atreve a oponerse a que los inmigrantes erijan sus torres, recordando qué significaban las del ya caducado poder terrenal del cristianismo.
Pero, por el contrario, la izquierda ha abandonado el racionalismo y se acoge al medroso multiculturalismo y al egoísmo, para atraer a nuevos votantes: la presidenta suiza, la socialdemócrata Micheline Calmy-Rey, dice que debatir sobre minaretes hace que “peligren nuestros intereses individuales y nacionales”.
Es decir: miedo. Este debate, seguido con pasión en el mundo islámico, está cargándose de amenazas tanto comerciales pacíficas como terroristas.
Por las buenas o por las malas, por alianza de civilizaciones o por aterrorizadas claudicaciones, nuestros políticos parecen desear devolvernos al medioevo al permitir, superado el poder de las viejas agujas, que nos dominen imponentes campanarios de voz humana en lengua árabe.
Yo me opongo al avance del Islam en Europa y en el mundo Occidental.... no me gusta, sus intenciones, sus premisas no son de una religión pacífica más, no producen nada nuevo o innovador bajo el Sol, y si no fuera por las divisas que el mundo Islámico obtiene de la venta de sus hidrocarburos, o de sus ingresos por turismo para visitar las antiguas civilizaciones realmente avanzadas que tuvieron algunos de los países donde se encuentran como Egipto, que sería de ellos!?!?!?!
Publicado por: Gaspar Payá | jueves, 14 junio 2007 en 07:17