Está claro que si usted desea lograr un buen futuro político tendrá que correr hacia la logia masónica más próxima y matricularse para estudiar esa carrera antes de que los grandes maestros impongan numerus clausus y exijan nota mínima de nueve.
Es que parece que para triunfar ahora hay que ser masón, porque aparte de ZP, según afirman numerosos analistas de obediencias arcanas, lo sería también José María Aznar, seguidor de otra observancia, se supone que rival.
Que ZP fuera hermano cantero era algo que venían afirmando numerosos medios informativos, tanto de derechas, como liberales, de izquierda radical y nacionalistas.
Hay incluso quien ve señales masónicas en su forma de mover y cogerse las manos, en sus alusiones a paces universales, en algunas de sus frases repetitivas, tan vacuas que forzosamente tienen que transmitir mensajes iniciáticos secretos.
Bien. Pero ¿qué dice usted del recio José María Aznar? ¿Se lo imagina usted con mandil e instrumentos de picapedrero haciéndole astutas señales a su amigo Bush, trabajador de albañilería, bajo una cúpula que simula un cielo estrellado, mientras pronuncia enigmáticos juramentos entre tibias y peronés cruzados?
El diario digital socialista El Plural, dirigido por Enric Sopena, conocedor de sociedades discretas como el Opus Dei, a la que perteneció, divulga que Aznar es miembro de la masónica Order Skull and Bones (SAB), Orden de la Calavera y de los Huesos, a la que pertenecen los Bush y otros mandatarios.
Si fuera cierto, qué hermoso sería contemplar un singar combate de ritos esotéricos, signos secretos vienen y van, entre las logias de ZP y Aznar.
Aunque muchos recordarán lo que dijo Julián Besteiro cuando lo invitaron a ser masón: “De gustarme las liturgias me quedaba con una misa concelebrada en latín”.
¿Realmente está usted convencido, o tiene pruebas, de que Ropdríguez Zapatero es masón, o de que lo sea Aznar López?
Por otro lado, ¿usted realmente cree que las organizaciones masónicas regulares se dedican a controlar la actividad humana cotidiana --profana, dicen ellos-- de los miembros de una logia?
Y por último, ¿realmente cree usted que las opiniones --sean aseveraciones o negaciones-- de los comentaristas que aluden constantemente a esas y a otras cuestiones merecen tanto crédito como para engordar la especulación y convertir la pura divagación --a veces malintencionada-- en asunto serio?
Por lo demás, su opinión, que acostumbra a dejar puertas abiertas --cosa fundamental--, merece respeto.
Visito su blog con cierta asiduidad y, la verdad, me gusta conocer sus opiniones.
Felices fiestas, mejor 2007 y un abrazo.
Publicado por: Félix Soria | domingo, 24 diciembre 2006 en 16:36