Algunos analistas se han escandalizado con Rodríguez Zapatero por decir en la Cumbre Iberoamericana que el cambio climático es más peligroso y mata más que el terrorismo que, con sus 191 masacrados del 11M, lo auparon a la presidencia del Gobierno.
Son analistas centrados en lo material cotidiano. No vislumbran la eternidad. Pobre mundo si no hubiera quién, como RZ, planifica la supervivencia humana más allá de la existencia individual.
Por eso él recibe mensajes etéreos, como el que lo transfiguró al pisar la ONU ordenándole que fundara la Alianza de Civilizaciones, fracasada previamente cuando la idearon los ayatolás iraníes.
También en un salón de la ONU se le reveló el imán chiíta desaparecido hace 1.128 años, el Mahdi, al actual presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad. Le anunció su segunda venida, en la que el islam conquistará el mundo.
Zapatero, Ahmadineyad: seres espirituales. Profetas. Quizás los nuevos Isaías, Jeremías, Ezequiel y Daniel, venerados por las tres religiones monoteístas.
Es lógico que los materialistas no entiendan cómo el primer ministro español puede decirle al presidente colombiano, Álvaro Uribe, que se preocupe más del cambio climático que por las decenas de millares de víctimas que provocan el narcoterrorismo de las FARC y otras bandas asesinas.
Pero Uribe no es espiritual, y los materialistas deberían creer que alguna fuerza superior, ángeles, diablos o extraterrestres, nos trae a Ungidos como él en momentos en los que convienen. El 11M pudo ser instigado por esos esoterismos para hacérnoslo llegar.
Por esa misma razón, para los espirituales aquellos muertos son anecdóticos frente al Mahdi que vuelve, y al Apocalipsis del calentamiento global.
Tenemos un Mesías, nuestro propio Mahdi, y no sabemos verlo, descubrirlo. Las señales: sus auras circunflejas.
Ignorantes, criticamos como a cualquier mortal a un espiritual con poderes paranormales.
Manuel: aunque no escribo mucho lo leo todos los días. Hoy muestra usted un humor muy crue, pero para mí absolutamente necesario, al analizar a este individuo que subió al poder sobre 200 muertos a los que ahora toma de broma. En una gran vergüenza.
Publicado por: Anna Castelló | miércoles, 08 noviembre 2006 en 09:12