El nuevo Estatuto catalán y el nacionalista que trata de crearse en Galicia no rompen España, pero crean un secesionismo cultural y laboral que provoca desencuentros con ciudadanos de otras regiones, lo que sí genera hostilidades mutuas.
Declarar obligatorio el conocimiento del catalán, el gallego, o el euskera después, para acceder a numerosas actividades en esas CC.AA. reduce notablemente las oportunidades para quienes no hayan nacido en ellas.
Esta aduana para la mayoría de los españoles es, aparentemente, un triunfo cultural y laboral de los habitantes originales de las Comunidades, que tendrán menos competencia externa para triunfar.
Pero las autoridades de regiones que son “no naciones”, donde habitan dos tercios de los españoles, podrían responder con una represalia típicamente diplomática, la retorsión.
Los políticos de esas “no naciones” pueden decidir no facilitarle trabajo ni contratos a quienes presenten títulos o referencias de las comunidades que rechazan a los que no hablan sus idiomas locales.
Decenas de millares de trabajadores, profesionales y empresarios catalanes, gallegos o vascos podrían encontrase sin salida fuera de su tierra de origen.
El amor al idioma regional está afectando ya a algunas funciones privadas típicamente liberales: pocos abogados no catalanes pueden actuar en Cataluña si desconocen el idioma local.
Como respuesta, hay letrados castellanohablantes que están reclamando en sus Colegios que se rechace a sus colegas catalanes como medida de retorsión por lo que consideran una agresión laboral.
La medida será inconstitucional, pero también debería serlo consagrar en los Estatutos el conocimiento obligatorio de una lengua no común en toda España, lo que hace extranjeros a la mayoría de los españoles en tres regiones.
Rechazar en numerosas funciones a los usuarios de la lengua común crea secesionismos culturales y laborales, y le reduce sus derechos a los ciudadanos.
"La medida será inconstitucional"
Todavía me estoy riendo... Hace tiempo que la Constitución Española NO SE CUMPLE en Catalunya.
Bien harán los de otras comunidades en pensar "en lo suyo", puesto que el Pacto Constitucional ESTA ROTO.
Si unos incumplen reiteradamente un pacto, quienes se empeñen en respetarlo son unos ILUSOS.
Lo dicho Manuel, con el nuevo Estatut d'Autonomia de Catalunya se ha cruzado el Rubicón o, dicho con otras palabras, abierta la Caja de Pandora, ABRASE DEL TODO.
Esos mismos que se quejan, cuando lleguen las elecciones, volverán a votar a los de siempre, a los partidos culpables de los MALOS TIEMPOS que se avecinan.
Mientras tanto, lo mejor, es asegurarse el BIENESTAR de uno y su familia, de modo lo más egoísta posible, ya que una mayoría, mediante el abuso del 50%+1 está INCUMPLIENDO el contrato social.
En lo que de mí dependa, haré todo lo posible para salir INDEMNE. Como la sociedad catalana, por activa y pasiva, así como la española, ha consentido que mis DERECHOS y LIBERTADES INALIENABLES sean vulnerados sistemáticamente, me siento moralmente autorizado para desvincularme.
En otras palabras, VAMOS HACIA LA INSUMISION CIVICA en Cataluña, tiempo al tiempo.
Mientras tanto, que el resto de españoles se apañen, con sus votos han permitido que las DISCRIMINACIONES vayan en aumento, así que, SON CULPABLES en la parte que les corresponda.
Que no cuenten conmigo para defender ninguna de las instituciones "democráticas" españolas/catalanas. El espíritu democrático se demuestra con los HECHOS no con palabras grandilocuentes.
Lo dicho, se ha cruzado el Rubicón, de mano del PSOE y nacionalistas. Muchos no quieren verlo, pero bueno, allá ellos. Algunos otros procuraremos "que no nos pille el toro".
Lo escribo desde el DOLOR, pero ya son muchos años de ABANDONO y MENOSPRECIO por no comulgar con la "verdad nacionalista".
Se acabó, en mi caso, el ir de "tonto útil". Se acabó.
Publicado por: maty | sábado, 15 julio 2006 en 01:08